martes, 17 de junio de 2008

Crónicas compulsivas (I)

El domingo limpié.

Encuentro terapéutica la acción de limpiar y ordenar la casa… más que cocinar.

Por eso, voy por partes. Dejé algunos rincones sucios, para continuar el domingo siguiente.

Sigo enamorada de la cama, del poncho, la tele, la ventana, los árboles... pero ahora me está haciendo ojitos la limpieza.

Me distrae. Me hace pensar en cualquier cosa, menos en él.

"Quién habrá dejado esta mancha extraña en el vidrio", "por qué no cambio de lugar este florero", "y si me compro el cable coaxial que hace falta", "vendría bien que le pase un trapo a esta mesa empolvada", "estos azulejos necesitan líquido especial"...

Por ahí me dijo un amigo que probablemente estoy generando un desorden obsesivo compulsivo. Jeje.

Yo sólo sé que veo polvo por todos lados y me inquieta.

Hoy me provocó ganas de no ir a la oficina para quedarme limpiando.

Conste que no me esmero tanto. Tengo que dejar un poquito de suciedad para cuando vuelva a estar sola.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

http://mundomusica.portalmundos.com/infinitamente-sola-de-lara/

Alan dijo...

cuando estoy de goma me entra la perseguidor de limpiar todo, fijate... un abrazo!