viernes, 5 de septiembre de 2008

(ii)

Cambié de lugar la cama.

Ahora los pies son la cabeza

la pared de la cabecera es de vidrio

y el sonido de la noche sabe a pino y tierra mojada.

4 comentarios:

LuisRo (P*!!!) dijo...

Lo bonito de los cambios, aunque sean en la estructura del cuarto, es que comenzas los días diferentes. No como estábamos acostumbrados.

Seletenango dijo...

Los cambios renuevan el corazón!

Allan Martínez dijo...

Siempre es bueno hacer eso. Huir de la comodidad y arriesgarse con algo nuevo.

Anónimo dijo...

qué bonito... un abrazo desde el otro lado del atlántico...
besos marta