viernes, 14 de enero de 2011

Entumecida

La anestesia empezó a hacer efecto.

Anoche el líquido inició su recorrido por el torrente sanguíneo y hoy por la mañana ya estaba instalado en el corazón. Esa es la idea. Le he encomendado al medicamento que me lo resguarde hasta nuevo aviso.

Por eso ya empecé a dejar de sentir cuando tus palabras me tocan, cuando leo mi diario, cuando tus ojos se cruzan con los míos, cuando el sándalo se enfurece, cuando tu piel se me acerca.

Mis cinco sentidos están entumecidos, al menos mientras sana mi corazón.


2 comentarios:

Allan Martínez dijo...

Yep... así he pasado yo bastante tiempo. Hasta ahorita se me está pasando el efecto. Ahora me está constando hacerlo latir y cómo cuesta y sí fue mucho tiempo. Eso sí... está mucho mejor pero muy huevón.

Seletenango dijo...

El dolor crea una especie unguento que va creando una telita en el corazón...hasta sanarlo...