lunes, 21 de abril de 2008

La ventaja de no planificar

Todavía estoy asimilando lo que me sucedió este fin de semana. Apenas me estoy creyendo que me fui el sábado a Costa Rica a ver a Smashing Pumpkins, Incubus, Babasónicos y Café Tacuba, que paseé por cuatro de las siete provincias ticas y que aún así, regresé el domingo a tiempo para ver Grey's Anatomy.

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El viernes tenía ganas de salir de mi casa, encontrar gente amigable y tomar unas cervezas. No me imaginé que el día se extendería más de 48 horas ni mucho menos que agregaría nuevos amigos a mi vida.

Esa noche no dormí. Bebí, platiqué, reí, bailé música electrónica, regañé... no puedo decir que me aburrí.

Llegué a mi casa a las casi 4 de la mañana, directa a la regadera porque el taxi nos recogería 30 minutos después. El agua tibia me despabiló. No sé ni cómo logré agregar la ropa de Alejandro en la mochila. Para cuando recapacité, ya íbamos dentro del carro rumbo al aeropuerto.

Ya en Costa Rica, nos recibió una familia hospitalaria, de esas que uno piensa que ya no existen. Nos abrieron las puertas de su casa sin pensarlo dos veces, a pesar de nuestro estoque a parranda y nuestros comentarios incoherentes.

Por la noche, viajamos en "una buseta" a la Guácima donde había empezado ya el famoso Festival Imperial 2008.

Debo confesarlo: hay demasiadas ticas fresas para mi gusto. Una de ellas nos pidió calma y cordura mientras gritábamos las letras de Café Tacuba... por favor!!!!! Definitivamente me gozo más a esa banda entre chapines.

Por eso, cuando llegó el turno de Incubus y de Smashing Pumpkins (Splashing Monkeys, verdad Pato?), estábamos apostados hasta enfrente, pegaditos a los de nuestra raza, coreando, brincando, gritando, desgarrándonos (verdad Gabriela?).

La noche terminó con Billy Corgan en la distancia. Nuestros cansados cuerpos nos obligaron a regresar a "la buseta" y dormir un poco mientras se reunía de nuevo toda la banda con la que llegamos.

Pudimos poner la cabeza en la almohada a las casi 5 de la mañana y hasta entonces pude dar las buenas noches y soñar con los angelitos.

Despertamos a mediodía del domingo y a partir de ahí, todo fue comida y caminata. Una belleza.

Las calles peatonales del centro de San José me recordaron al Paseo Florida en Buenos Aires. Cómo apoyo lo que decía el Che cuando se refería a América Latina como una sola región hermana... Somos tan parecidos!

Y cerramos la aventura con broche de oro: nos despedimos personalmente de Brandon Boyd y de DJ Kilmore (Incubus) en el aeropuerto. Aquí les dejo la única imagen que grabó Gabriela en su cámara. Pero las que grabó nuestra memoria son mejores!

Pero bueno... Si les dejo aquí todos los detalles de este fin de semana, me echan de la oficina por improductiva. Cuando los vea se los cuento todo!

4 comentarios:

GavilaSavilaMavila dijo...

...nos desgarramos, dejamos un pedazo de nosotras en ese amplio espacio de tiempo y lugar amiga... de las mejores experiencias, de esas que se llevan en el corazón y qué bueno que la compartimos!!! y Brandon Boyd quéee???? Goood bye, nice to know u!!!

Unknown dijo...

Wow... ya había escuchado parte del viaje con sus palabras... pero al parecer hacía falta.
Mujerrrrrr.... era una señal deplano, si te vas de la AECID, todo lo bueno viene. Nos alegra... al Coca también--- solo que alega que porque para el BLOG... si hay tiempo. aaa?aa?aaa? jajaja

Anónimo dijo...

hahh exelente! wendyta aunque siento que el ale no se lo merecia tanto como tu ahahahahah!! saludos my friend

A. Sanchez

Unknown dijo...

...volvemos a Brandon, esta bien, esta bien, esta bien, creo que necesita descansar para darle viaje a los espasmos que tanto les gusta, jajaja, pero es simpàtico no lo vamos a negar. Saluuuu !!!!